Las normas ISO se han consolidado en el mercado como el principal estándar de calidad, dotando a las organizaciones que obtienen sus diferentes certificaciones de un sello de confianza de gran reputación. Estos certificados son de gran relevancia en múltiples sectores de diferente índole, y las organizaciones sanitarias y sociosanitarias son un claro ejemplo de ello.
A pesar de que existen más de 20.000 certificaciones ISO diferentes, algunas de ellas destacan por encima de otras en este sector, siendo especialmente relevante su obtención en instituciones del sector de la salud.
Modelo de gestión ISO en el mercado de la salud
Para que las normas ISO puedan ser aplicables en el contexto sanitario, se requiere que las instituciones centren sus esfuerzos en el proceso de adaptación y actualización de su sistema de gestión. El resultado de esto deben ser servicios sanitarios más automatizados y con una mayor productividad. Para ello, se deben de aplicar ocho principios a cualquier sistema de gestión:
- Organización enfocada al cliente.
- Liderazgo.
- Participación del personal.
- Enfoque del proceso.
- Enfoque del sistema hacia la gestión.
- Mejora continua.
- Toma de decisiones en base a datos objetivos.
- Relación beneficiosa con los proveedores.
Certificación ISO 9001 en el sector de la salud
El sector de la salud vive continuamente expuesto a cambios de diversa índole, desde avances médicos para el tratamiento de enfermedades hasta, como ha ocurrido desde 2020, variaciones para poder adaptarse a la pandemia.
El certificado de calidad ISO 9001 aporta a los centros y servicios médicos los estándares y las herramientas necesarias para adaptarse a todo este tipo de novedades. Estas mejoras pueden ser percibidas de dos modos diferentes:
- Satisfacción de los clientes. Se refiere de forma directa al modo en que los pacientes perciben la calidad del servicio justo de recibir la atención. Esta evaluación se determina en función del tiempo, la administración, la ética del personal del sector sanitario, la atención psicológica y los materiales utilizados.
- Calidad técnica. Para ello, se evalúan aspectos como la efectividad, seguridad y la utilidad de los procesos que se realizan para prevenir, proteger y promover la salud en los pacientes.
Además, de forma paralela permite acceder a contratos más exigentes, licitaciones y acuerdos internacionales a los centros certificados; e incluso mejorar la calidad percibida por parte de todos los agentes cercanos a la misma.
Procesos para certificarse
Las organizaciones que pertenecen al sector sanitario tienen la posibilidad de certificarse bajo diferentes procesos. Abajo se exponen los tres más comunes en este área:
- Proceso de atención médica en hospitalización. Tiene en cuenta las actividades desarrolladas por médicos generales y especialistas, personal médico técnico y aquellos encargados de atender y dar solución a las peticiones de pacientes que se encuentran en las salas de cirugía y medicina clínica.
- Proceso de atención médica en emergencia y cuidados intensivos. Engloba las actividades del personal médico desarrolladas con el objetivo de atender y resolver las exigencias de los pacientes que se encuentran en áreas de emergencias y unidades de cuidados intensivos.
- Proceso de atención médica en consulta externa. Comprende las actividades de los profesionales sanitarios enfocadas en atender y solventar las peticiones de pacientes en consultorios o consultas externas.